Con motivo de las consecuencias generadas por el COVID-19, mediante HAZI y en colaboración con el Gobierno Vasco, las tres Diputaciones Forales y el sector agroalimentario de Euskadi se adoptaron una serie de medidas para evitar el despilfarro de productos agrarios; una de ellas, precisamente, fue la puesta en marcha de un Sistema de Recogida de Excedentes.

Este servicio de recogida y comercialización ha estado dirigido a aquellas personas productoras que no han podido vender sus productos en las ferias habituales o en el canal HO.RE.CA., canalizando sus excedentes principalmente a operadores de la gran distribución como Eroski, Uvesco (BM), Alcampo y Carrefour. Dada la complejidad organizativa del servicio, se ha contado con la empresa Lurrarte Baserriko Uzta por su experiencia en logística en este campo, y con algunos operadores del mercado como Barrenetxe Koop., Alberro Barazkiak S.L. o Garaia Koop. E.

El servicio se ha mantenido operativo desde el 29 de marzo y considerando que el servicio ofrecido ya ha cumplido con los objetivos perseguidos y la causas que provocaron su instauración van volviendo a la normalidad, a partir de hoy deja de ofrecer sus prestaciones.